Actualmente un alto porcentaje de parejas concluyen su relación matrimonial mediante el divorcio por muchos consejos que nos den para evitarlo , si tenemos que pasar por esa difícil situación, es conveniente estar informado.
Antes de iniciar cualquier proceso judicial es muy conveniente conocer y diferenciar entre las distintas figuras jurídicas que ponen fin a la relación matrimonial. La nulidad es el acto mediante el cual el matrimonio realizado queda anulado, a todos los efectos es como si no hubiese existido. La separación es el acto mediante el cual los cónyuges deciden poner fin a su convivencia, pero no se rompe el vínculo matrimonial. El divorcio sí rompe el vínculo matrimonial pero no tiene efectos retroactivos. Anteriormente era necesario pasar por la fase de separación antes de poder solicitar el divorcio, a partir de la reforma legal introducida en la normativa en el año 2005, se puede optar por una fórmula u otra directamente. Sigue leyendo